domingo, 27 de mayo de 2018

memorias de una traición

Hoy en dia me cuesta un poco confiar en las limpias intenciones de la gente, se que debe haber personas honestas, sin embargo es tan arriesgado confiar que prefiero no hacerlo. Mi razón quiza no es tan buena como otras sin embargo para haberme pasado con personas que apresiaba tanto me hizo de esta manera.
Era invierno en el puerto y la frescura de la brisa llegaba incluso a travez de los enormes edificios, el viento ligeramente humedo y el sol brillando a plenitud daban una sensación reconfortante, yo me encontraba cursando el primer año de preparatoria y apenas tenia amigos, solo 2 que eran inseparables y yo que me sentia como una intrusa en su amistad que era desde primaria. Pero eran tan buenas persona, amables y calidas. las amenas conersaciones que teniamos brindaban a mi alma una paz extraña acompañada de algunas carcajadas ocacionales. Todo era tan pacifico, Hasta que la conocí, una chica de apariencia algo comun pero con unos enormes y hermosos ojos negros, el resto de su persona no resaltaba mas que cuando resplandecia en su rostro una inocente y dulce sonrisa. Al principio solo crei que era una chica agradable y me gustaba verla sonreir, me volvi casi una figura comica por aquel entonces. El grupo creció, ahora eramos 4 y aquellas dos que siempre fueron amigas de vez en cuando se iban y nos dejaban charlando a solas, aunque eramos 4 era notable quienes se llevaban mejor, no me molestaba en lo absoluto, comparti tantas cosas con ellas, pero en especial con ella, nos vovimos muy cercanas y al paso del tiempo en mi comenzó a surgir un sentimiento extraño, era demaciado divertido estar con ella, demaciado tranquilizante, demaciado placentero para mi alma. Me enamoré, pero que podria esperarse de eso... ella no lo notaba y  yo no queria que lo hiciera, seria comlicado que llegara a saberse, para ambas seria una desgracia, asi que guade silencio. Mi corazon se acostumbro a sentirse abatido sin que mi rostro lo reflejara cada vez que ella llegaba a presumir de algun nuevo chico guapo que la cortejara, un novio nuevo o una aventurilla ocacional... Dolia, agitaba mi alma y me tragaba de a poco mi frustración. Me decia a mi misma que no podria ser nunca, que debia guardar silencio para permanecer a su lado, tenia el privilegio de poder estar siempre a su lado, eso me parecio mas que suficiente.
   Al llevar poco mas de un año de conocernos ella al parecer comenzo a preocuparse de que yo pasara la vida sin tener una pareja. Un día me pregunto cual era mi tipo de chico ideal y yo le respondi: Alguien a quien le guste conversar, leer, que le guste de igual manera el cilencio y que sepa apreciar la musica y la pintura. Ella era asi completamente pero se limito a responderme -Con razon nos llevamos tan bien- con una sonrisa inocente.
   Al día siguiente me presentó a un amigo suyo, le connocia de vista, una vez lo vi conversando con ella en la parada del autobus, lo salude casualmente pero por dentro mis celos querian atravezarlo.
    Ella penso que podriamos llevarnos bien, en aquel momento me senti tan triste que creo que si no llore es por que las lagrimas fueron a llenar el vacio que senti en mi corazon en ese momento.
    Se fue con una tonta excusa y me dejo a solas con el, lo odiaba, pero en quel momento tambien la odiaba a ella. Nunca nadie notaba mi tristeza o si algo me molestaba, sin embargo el lo notó de inmediato, me preguntó que era lo que me pasaba y yo, tan mal como me encontraba en ese momento, y con agrimas de sobra, comence a llorar. El de manera torpe no sabia que hacer, paseaba sus manos en el aire por encima de mi, las regresaba a sus costados y repetia el movimiento, yo estaba un poco aturdida asi que simplemente me quede quieta, hasta que mis pies reaccionaron y comence a correr, atravece aquellas calles que recorri con ella tantas veces hasta llegar a la playa, mis zapatos se llenaron de arena y cuando me asegure de que no hubiera nadie, me arroje a la arena humeda por las olas a mi rostro se pego la area salada y brillante, lloré por un rato y cuando hube terminado voltee y ahi estaba el, se limito a verme y me ofrecio su chaqueta para limpiarme la arena pegada al cuerpo, ambos permaneciamos en silencio y cuando habiamos llegado a la avenida pregunto -¿Donde vives?, quiza pueda acompañarte una parte del camino -Me escolto por un rato y se aseguro de que subiera a un taxi.
   Al dia siguiente al llegar a la escuela la vi a ella parada en la entrada y el estaba a su lado. Pregunto que era lo que habia pasado el dia enterior y por que habiamos salido corriendo los dos, al parecer el no le contó nada.
   El solo dijo -Es un secreto- y me preguntó si podiamos vernos al terminar las clases, me limite a asentir con la cabeza, era un tipo amable pero aun no sabia como debia tratarlo.
   Al llegar al salon de clases las otras dos se apresuraron hacia nosotras y me preguntaron que habia pasado entre yo y el amigo nuevo. Bromee como siempre diciendo que tal vez ya habia encontrado novio entre carcajadas.
   Al salir de las clases el estaba en la entrada y me saludo amablemente con un beso en la mejilla, a pesar de ser algo comun en ese lugar, para mi no lo era tanto por que no soy de muchos amigos. Ella se despidio de ambos y se fue. El tenia un semblante sereno, un rostro muy varonil y unos pequeños ojos negros que reflejaban confianza y entusiasmo. Me invito a caminar y despues de un largo silencio me pregunto -¿te gusta ella no es asi?- La pregunta me tomo tan de sorpresa  que mi rostro se deformo en una comica exprecion de sorpresa. -Lo sabia, la vez que te conoci la estaba tomando de las manos y tu lanzaste una mirada tan espeluznante que crei que de verdad podrias matarme- Dijo, y yo ya sin tener nada que ocultar simplemente me desahogue con el y estubimos conversando por mucho tiempo, era una persona muy agradable, maduro y confiable. El tiempo paso mas rápido de lo que parecia y cuando me di cuenta ya era hora de irme, en ese momento el me tomo del brazo y me miro fijamente a los ojos diciendo - sabes que lo de tu y ella es un caso perdido verdad- me senti furiosa y frustrada nuevamente, estaba a punto de golpearlo en la cara cuando dijo - Conmigo no tendrias que pasar por ese sufrimiento. Me gustaste desde que ella comenzo a contarme de ti- el puño que habia formado el la mano se deshizo rapidamente y un taxi se paro justo enfrente, ni siquiera pregunte si llevaba pasajeros ya, abri la puerta y me subi rapidamente, el taxi se alejo y solo vi su rostro serio perderse en la distancia sin apartar la mirada de mi.
   No alargaré tanto la historia, le dije que podiamos darnos una oportunidad y comensamos a salir como amigos mas veces, Era una persona increible, cada dia era divertido y conocia nuevoa aspectos suyos, poco a poco comenzo a ocupar un lugar en mi mente y la antigua herida estaba siendo cerrada, aun era muy amiga de ella y le contaba todo lo que pasaba con el.
   Como una tonta me enamore nuevamente, comenzamos a salir como novios y todo era muy bueno y divertido, llegamos a salir los 5, ella, mis otras dos amigas, el y yo. Pero no todo dura para siempre.
    El tercer año de preparatoria estaba llegando a su fin y todo estaba muy agetreado con los preparativos de la graduación. En aquella ocación, como si el cielo estubiera dando un aviso de catastrofe era todo gris y hacia frio, el viento corria revolviendo todo a su paso, arrastraba basura de los arboles o de los contenedores. Durante esos preparativos me enviaron a un salon donde un profesor podria entregarme unos papeles, pero de camino ahi note algo extraño, una sombra de dos personas besandose dentro de un salon solitario, no le preste mucha importancia asi que continue caminando. Pero senti una conmocion enorme cuando al regresar vi salir de ese salon a ellos dos .. a el chico del que estaba enamorada y mi mejor amiga. Pero de inmediato me tranquilise cuando vi que ambos me sonrieron y se ofresieron a ayudarme con los papeles, debieron ser otras personas pense.
    Sin embargo no me quede del todo callada y le conte a el que habia visto a alguien besandose en ese salon. El un poco sorprendido me dijo -Tengo algo que confesarte- entonces muy en el fondo estaba preparada para lo que fuera asi que mi expresión no cambio ni un poco -¿Qué es?- le pregunte.
   -Bese a otra persona... aun amiga en el calor del momento- Me senti muy desepcionada, pero ya no estaba trizte ni enojada -Besaste a mi mejor amiga a pesar de lo que te conte cuando te conoci, eres muy diferente a lo que creí, ella tambien lo es... y dime ¿que esperabas que hiciera cuando me lo contaras? ¿creiste que lloraria y podrias consolarme y arreglar las cosas con la excusa de que fue el calor del momento?.. lo siento mucho pero los odio demaciado como para continuar viendo a cualquiera de los dos-
Pero ella nunca me dijó nada y deje de hablar con ambos incluso luego de la graduación, las otras dos estaban al tanto de todo pero aun se mantenian en contacto tanto con ella como conmigo.
   Un día ella volvio a entrar en contacto conmigo y yo, quiza por tonta o quiza por compación acepte que volieramos a conversar, y llegue a darle mi número telefónico, solo para que una noche llamara y con algunas copas encima me dijera - Me has gustado desde preparatoria- en ese momento lo noté, mi corazón ya no reacciona.

El primer Maestro Maestro:  Aquel que tiene el poder de transmitir una enseñanza. Para que haya un maestro es esencial un alumno, y es por...